lunes, 31 de mayo de 2010



"Soy un bicho de la tierra como cualquier ser humano, con cualidades y defectos, con errores y aciertos, -déjenme quedarme así- con mi memoria, ahora que yo soy. No quiero olvidar nada."



José Saramago

viernes, 28 de mayo de 2010




Dile que no estoy.


Durante toda la semana me acordé de una persona que no tendría por qué recordarla. No es amiga, ni familiar, ni vecina, ni siquiera conocida. En el verano de este año, estaba junto a mi Madre en un café de la galería Cristal en Viña del Mar. Hablábamos de las elecciones presidenciales, de su matrimonio, de la receta de galletas de maicena y de mi cambio de ciudad y pronta convivencia con mi Padre. Mientras conversábamos yo agarré el diario, con mi Madre es una de las pocas personas que realmente me siento cómoda para entablar un diálogo mientras leo. Al momento de leer me di cuenta que al frente mío estaba esta persona, esta joven muchacha a quien no veía hace años.

Mi Madre me seguía hablando, y tuve un gran flashback y me vi acostada pretendiendo donar sangre. Era para ella, quien sufre de polio y yo el 2006 le quise dar sangre y no me dejaron. No me dejaron por mi bajo peso de esa época y tenía todas las ganas de que vivieran, aunque ella no me conociese, ni yo a ella, aunque en mi vida la había visto, pero sabía que ella quería vivir, lo sentía y lo sabía. Ese año estuvo bien mal, luego estuve pendiente de su recuperación y estado de salud permanentemente, era finalmente una ex compañera de colegio de un ex pololo y yo lo único que quería era que viviese y que fuera feliz.

Al verla en ese café conversando con una amiga me sentí plenamente agradecida. Lo único que quería era ir hacia su asiento y abrazarla, por un momento pensé en decirle " Sabes, tu no me conoces, pero una vez quise donarte sangre cuando estabas complicada de salud y me alegra que estés bien". Lo más probable es que me hubiese mirado raro y se hubiese reído nerviosamente, o también me hubiese dado las gracias en el caso contrario. Pero a mi no me importa, fui feliz de verla bien, y tanto así que se lo comenté al oído a mi Madre.

Todos estos días la he recordado y le deseo muy bien, aunque se me olvide su apellido, siempre recuerdo su nombre y sus ojos verdes.


martes, 25 de mayo de 2010





Tú y yo somos como la editorial de diferentes diarios.

viernes, 21 de mayo de 2010



Sí, es sólo cuestión de perspectiva.

Pasó mucho tiempo y tener tantas libretitas de apuntes y papeles sueltos no fue suficiente, quise volver a escribir. Desde hace un buen tiempo a la fecha las letras se han apoderado de mí y a veces siento que me transformo en una gran N, será muy Kafkiano, no, será muy de Rimbaud con el poder que le da en su poema H a su protagonista H, Hortensia.
Soy una gran N, a veces MAYÚSCULA y otras veces minúscula.




Con urgencia necesito sacarte de mis entrañas. ¿Me ayudarías?, pero no me dejes tirada contra los escalones como siempre sueles hacerlo, ni me quites ni amares mis manos. Déjame hacerlo, déjame ahogarme en el fulgor de tu verde mirada.


lunes, 17 de mayo de 2010


Soñé contigo, soñé que nos encontramos en un bus y luego me debía bajar, tu me dijiste que no tenías nada que hacer y me querías acompañar y llegamos a un lugar deshabitado y anacrónico, gris y perdido.




sábado, 8 de mayo de 2010





Magnolio en llamas
cubierto de espesa y aterciopelada nieve
abriga las ramas de los altos árboles
lanzándo escupitajos florales.