lunes, 5 de abril de 2010




Y luego, lo más importante de todo: recordar quién soy. Recordar quien se supone que soy. No creo que esto sea un juego. Por otra parte, nada está claro. Por ejemplo: ¿ Quién eres tú? Y si crees que lo sabes,¿ porqué insistes en mentir al respecto? No tengo ninguna respuesta. Lo único que puedo decir es esto: Escúchame. Mi nombre es Paul Auster. Ése no es mi verdadero nombre”.